lunes, 26 de marzo de 2012

(El arte de no filosofar)


El no filósofo ha comprendido, no, ha advertido, por pura intuición, que pensar en aquellos problemas que el filósofo pasará su vida intentando resolver, le haría infeliz.  Ha visualizado, quizá muy prematuramente, que la ruta hacia ese tipo de conocimiento sería demasiado larga, cansadora y frustrante, por ello ha tomado las rutas aledañas. En síntesis, el no filósofo, en tanto que humano, ha filosofado que filosofar no es lo preferible para él. Con la gran diferencia de que su filosofía no aspira a nada, no pretende más que el uso práctico, es más, su filosofía es  inconsciente de sí misma y por ello, tal vez, le provee soluciones. Entiéndase bien esto último, he dicho, soluciones, no explicaciones ni fundamentos.

Carla. 

domingo, 25 de marzo de 2012

(Tiempo terrestre, tiempo caótico, tiempo mental)

       Como se habrán dado cuenta, el tiempo del Caos no es igual a la concepción que se tiene en la Tierra, eso explicará suficientemente por qué a veces dejamos de escribir. En fin...Un momento, ¿qué era lo que iba a escribir?, ah sí claro, esperaba que para este instante, digamos, cuando llevara unas 3 líneas, tendría un tema más o menos definido del qué hablar. Sin embargo, como generalmente ocurre con las esperanzas -como me he encargado de señalar en otro post- he sido traicionada. 
   Se preguntarán entonces, ¿para qué escribo si no tengo un propósito, si no hay un fin?, o aún más, ¿he transformado esto en una obligación?. Pues, (mientras tanto se mueven los engranajes de mi mente, se escucha el sutil impacto de las ideas encontradas), la mejor manera de comprender este sin sentido, es con un cuento que he hallado en un recóndito rincón del Caos. Sus autores no han sido identificados, pero consideramos que es bastante decidor.

"Los caóticos -así nos llamamos los habitantes de este universo-, periódicamente abandonamos nuestras respectivas mansiones para visitar uno de los múltiples universos aledaños: Tierra. Desde los primeros días en aquel lugar -particularmente intrigante, debemos decir. Imagínense que en una de las regiones visitadas existía un hombre, "presidente", se hacía llamar, encargado de dirigirla. ¡Y todos los habitantes lo dejaban!-, pudimos advertir varias costumbres ajenas a las nuestras. 
Una de ellas, en la que me concentraré esta vez, era la necesidad de la existencia de un propósito, de un fin -muy "Aristotélica", dicen que era-, estaba tan instalada en las consciencias de todos, que no parecían ser capaces de concebir actividad alguna sin ella. Era como si  todo lo que se hiciera, debiese llevar consigo una declaración de principios, una ficha técnica que indicara (un momento, me informan que está temblando en Tierra...no se preocupen ya se detuvo. Creo que en ese Universo es muy usual que el suelo se mueva de vez en cuando, al parecer su planeta no los tiene en alta estima) como decía, es como si se necesitase una ficha técnica que indique no sólo qué mueve a cada persona a emprender tal o cual acción, sino además, que espera lograr con ella. Porque, me explicaba un terrícola en una de mis visitas: "¡no podemos utilizar así como así el patrimonio más sagrado de la humanidad!, ¡no podemos hacer usufructo de tal bien sin que se espere un beneficio potencial!"...
Más tarde supe, queridos viajeros, que esa persona hablaba del tiempo. Sí, después de todo, a pesar de que se declare otra cosa, lo que realmente parece importar a nuestro universo vecino, es que se ha gastado tiempo (Sorprendentemente allí el tiempo ha dejado de pertenecer al ser humano, actualmente es considerado un recurso). Por lo tanto, los terrícolas  disponen de tiempo en cantidades limitadas, a diferencia de los caóticos, acostumbrados a la inexistencia tanto de unidades temporales repetitivas  como de artefactos que las midan. "Qué extraño", pensé al principio, aunque luego estaba tan ocupada que no pude seguir pensando. Sin embargo, también alcancé a atesorar otros testimonios antes de que me arrancasen la capacidad de familiarizarme con mis propias ideas. Por ejemplo, advertí que muy ligado a las particularidades del tiempo terrícola, está el "sentido de la obligación", distinguible del "sentido del deber", que pertenece a una dimensión más ética de la experiencia. El sentido de la obligación, en Tierra, tiene que ver con  actividades, acciones e incluso pensamientos considerados imprescindibles para el desarrollo normal del Universo. Tales como: tener "sentido común" (lamento no poder explicar esta idea debido a que en Caos no tenemos nada parecido a eso), repetir cíclicamente una serie organizada de movimientos (despertarse a una hora del día por aproximadamente 6 días terrícolas y descansar el séptimo, de no haber inconvenientes; comer unas 3 veces, aunque aquello está sujeto a la eventual aparición de asuntos más relevantes como lo es entregar un informe o reporte de lo que se haya producido en la jornada. Formar cadenas de personas para acceder a bienes y servicios, lo que implica que el orden para recibir el bien o servicio esperado, está dado por el "orden de llegada" y no por la necesidad o urgencia, etc.)Hay muchísimas actividades que forman parte de las obligaciones de nuestros vecinos, por lo que no sería posible explicarlas aquí, además, temo que nuestra comprensión con respecto a estos asuntos es muy limitada, tanto más cuanto los terrícolas son muy reacios a hablar de sus prácticas e incluso algunos parecen ignorar aquello que los define. De hecho, tras sólo dos semanas -medidas en tiempo terrícola-, me vi obligada a abortar la misión, pues, pese a que cada día aparecían nuevos comportamientos dignos de ser analizados, las estrictas normas de Tierra me impidieron tomar  más notas o captar testimonios para poder presentarles y además, poco a poco hizo aparición un nuevo y aterrador sentimiento al que los terrícolas se refieren como "culpa". Puedo decir, que de entre todas, la culpa es una de las cosas más terribles que un humano debe soportar en aquel universo, puesto que impide una ruptura -a elección- de la norma, a través de la amenaza de horrorosas consecuencias futuras para el delincuente, tanto físicas como psicológicas. Aceptarán y comprenderán entonces las razones de mi repentina huída, puesto que para un Caótico no hay nada más difícil que perder la independencia"

      Creo que lo anterior explica el problema con mayor claridad de la que yo soy capaz de lograr. Sólo puedo concluir que, tal como se desprende del testimonio de nuestra habitante anónima, los códigos de conducta permitidos en el Caos son diametralmente distintos a los de la Tierra y la justificación de nuestras acciones no es requerida, pues quien las realiza tiene plena libertad de sentir aquello que hace.

CARLA.

sábado, 24 de marzo de 2012

¿Entrar o no entrar?

Es increíble como te das cuenta de cosas nuevas solo haciendo algo inesperado.
Hoy vine a la U, subí las escaleras, camine hasta la sala y me quede mirando la puerta azul como si tuviera que tomar una terrible decisión… ¿entrar o no entrar?
Se supone que si me di la flojera de levantarme de la cama, ducharme y esperar 15 minutos una micro que nunca llego para luego finalmente irme en un colectivo (450 pesos malgastados) y caminar dos cuadras hasta esa desoladora puerta, la decisión ya debería estar tomada ¿no?
Pero no lo estaba. Hasta ese minuto me di cuenta de algo hermoso y terrible a la vez.
Terrible porque desde que desperté hasta que entre al edificio actuaba como una autómata. Yo, Rocío, debía ir a la U a estudiar porque así le dijeron y si no iba y se quedaba en casa era peor que una terrorista.
Hermoso porque de pronto, cuando mire la puerta, me di cuenta que la decisión aun no estaba totalmente tomada. Había rezongado todo el camino por “tener” que ir a Teorías del Desarrollo, un ramo (que a mi parecer) ya había tenido dos veces antes con Historia Socioeconómica y Desarrollo Nacional y Regional y, de hecho, ya iba malhumorada por tener que aguantar las 3 horas de lo mismo…hasta que decidí hacerme la pregunta; ¿entrar o no entrar?
Pfff no entre.
Niños, en serio, el día que pongan su propia Universidad no creen ramos challa o de relleno como los que tengo yo, mejor creen ramos donde se pueda debatir la materia aprendida.
El caso es que no entre y me dije: ¡Vamos a tomar desayuno!
El casino no estaba abierto.
Luego me dije: ¡Vamos a los computadores!
Estaba cerrado.
Y con mis piececitos arrastrando llegue a sentarme a la escalera del edificio C. Incluso pensé en entrar a clases…no, no lo hice, salí media terca para mis cosas. Así que decidí quedarme allí hasta que alguien en esa maldita Universidad decidiera ir a trabajar. Llegue a pensar que, tal vez, solo tal vez, no hay nada mas funcionando en la U porque como hay clases se supone que no hay absolutamente nada más que una persona normal pueda hacer…¿¿¿medida de control mental y teorías de dominación generacional por parte de los funcionarios???
Y  ahí estaba yo, pensando en planes de control mundial como Salfate, cuando me di cuenta (nuevamente, parece que era el día de fijarme en detalles) que todos los estudiantes que subían por esa escalera lo hacían con los pies arrastrando y con cara de ir a la horca.
Ah y la típica pregunta que escuché más de una vez: ¿Hiciste el trabajo/tarea?
Con su típica respuesta que también escuche mas de una vez: No… ¿Había trabajo/tarea?
En serio… ¿Qué diantres esta pasando?
Es como si ya desde pequeños comenzáramos a hacer cosas que nos disgustan y ni siquiera nos diéramos  cuenta. ..Se supone que la U es para ir a estudiar algo que nos interesa (yo amo lo que estudio excepto esos ramos de relleno) y de lo cual queremos seguir aprendiendo, pero lo que vi es algo completamente diferente. Si te gusta lo que haces no vas con cara de funeral ni con los pies arrastrando, deberías ir con cara de extrema felicidad (la sonrisa del gato parlante de Alicia en el país de las maravillas se me viene  a la mente) y dando saltitos…en un principio la Universidad se creo para entregar conocimientos, para aprender empíricamente y discursivamente.
Con el asunto de la Educación Gratis y de Calidad pareciera que la atención se desvió trágicamente de lo verdaderamente importante.
¿Qué esta mal en la Educación que solo provoca un sentimiento de represión en las personas?
¿Qué esta mal en las personas, en las nuevas generaciones que al parecer no logran ser felices ni estar satisfechos con nada?
A riesgo de parecer muy cliché, solo aquellos que estudian algo que de verdad les gusta (Ingeniería en Sonido, Licenciatura en Historia, en Literatura, en Artes, Periodismo y la lista sigue. Carreras que prácticamente no tienen mundo laboral) parecen ir un poco mas satisfechas a clases.
Pero ¿Qué sucede con aquellos que aman algo que no esta en la lista de carreras de las Universidades?
Yo me siento más que agradecida por encontrar una carrera que llena MIS requisitos, no una donde Yo deba amoldarme y cambiar mis intereses, porque es lo más parecido que hay en el Mercado.
Padres, estudiar algo por estudiar no te asegura la vida.
Nada es seguro en la vida.
Hasta el término seguridad es una palabra que no existe más que en el mundo de las ideas.
Y apesar de que hemos hablado bastante de esto con todo el mundo, puedo apreciar claramente como todavia esta forma nueva de ver las cosas no esta totalmente insertada en nuetra mente, pues de pronto se nos olvida lo que tanto criticamos, se nos olvida ir en contra de la corriente que tanto detestamos, se nos olvida PENSAR, mas que eso incluso, olvidamos CONCIENTIZAR.
Y ahí estaba yo…”corriéndome de clases”, CASI sintiéndome como una criminal porque toda mi vida me han dicho que hay gente que no puede estudiar y  que yo no lo estoy aprovechando.

Note que cuando digo pensar o "concientizar", no estoy empujándolos a olvidar  todo y a dejar de esforzarse. Es obvio que cuando uno quiere "llegar" a algún punto (como terminar una carrera) tiene que pasar por ciertos baches o aguantar cosas que no te agradan, pues ya estamos viviendo en una sociedad que termina por complicar todo y que ya perdió el rumbo de lo saludable, y es así con TODO, no solo con este asunto del estudio.

Pero he conocido gente que eligió no estudiar….y es feliz, e incluso, mas culta ¿Qué sucede con ellos? Son unos parias que no están ni “ahí” con nada, diría mi santa abuela. Aaahh los prejuicios nos terminaran matando algún día.
El problema es que no todos queremos lo mismo....no todos queremos casarnos, o no todos queremos pertenecer a un partido político, o no todos queremos salir en la tele, como tanto se nos promete en la publicidad. No somos tan lineales, las personas no vivimos de una sola forma sino que de muchas. Y el estilo de vida que nos imponen desde pequeños muchas veces nos va matando de a poco, muy lentamente y sin darnos siquiera cuenta. Nos mata la libertad, la imaginación, la creación, nos mata las ideas (porque; "esto no puede ser", ¿Cuantas veces haz escuchado eso?) y lo peor de todo, es que ni siquiera se nos ocurre ver que este estilo de vida no es el correcto, porque ya estamos acostumbrados, ya estamos resignados. No esta mal tomarse un respiro de todo, salir de lo cotidiano o de lo que "tienes" que hacer, y luego volver a ello...porque es un mal necesario. Y digo un mal necesario porque luego gracias a ese mal, vas a conseguir las herramientas para poder ir en contra . Porque para ver que es lo que esta realmente equivocado primero debes vivirlo. 
Como dice un viejo dicho,  deberías conocer a tu enemigo como al mejor de tus amigos...solo que en este caso no veas aquello que te oprime o que no te gusta como a un enemigo, sino que velo como un maestro que te enseño como combatirse a si mismo. 

Y entre pensamiento y conclusión comenzó a emerger vida en mi U, la gente de pronto ya se había duplicado y el casino había abierto.
El espíritu como que regreso a mi cuerpo y me acorde que estaba muerta de hambre, así que me levante y me deje guiar por mi nariz, hacia el café.

Sin darme cuenta habían pasado tres horas...y ya me encontraba un poco mas optimista, aun cuando el ultimo pensamiento que tuve antes de abandonar mi puesto al pie de la escalera, fue: 

El próximo martes a clases...por ahora.

Rocio.

domingo, 18 de marzo de 2012

(Lo que no nos gustaría saber)

Usualmente nos sentimos mal por no saber algo o por saberlo mal. No es raro andar pasando vergüenza por la vida debido a la ignorancia, aunque lo mejor es no estresarse por eso porque cuando descubres que no sabes algo y tratas de aprenderlo, lo aprendido te lleva a otra cosa que no sabes y la lista es infinita. No es que sea malo ser curioso, de hecho, la curiosidad debe ser una de nuestras cualidades más sanas. Sin embargo, si seguimos obsesivamente el camino del "saber", el saber reificado, maqueteado, absurdo e incomprensible; lo único que terminaremos sabiendo es como se siente la frustración, la angustia y el fatalismo. Y eso, es mejor no saberlo...tan bien.
Pero no hablaré aquí del “saber” como eruditamente se le concibe. Sino del saber cotidiano, de eso que aunque no deseemos conocer, llega a formar parte de nuestro universo mental. Hablaremos de aquel conocimiento o información que para no saberla, es requerido vivir en otro país, o a veces, en otro planeta. Es que se instala como parásito en nuestras conciencias, y mientras más resistencia oponemos, mayor es el caudal de basura recibido. Lo peor es que somos conscientes de cuanto espacio y tiempo utiliza, pero hasta el momento, hemos fallado en el intento de bloqueo. Pero, salgámonos del abstracto y pongamos en claro a qué nos referimos cuando hablamos de conocimiento parasitario.
Una vez leí un capítulo de un libro que versaba: “Lo que no habría que saber”, en aquel momento, ¡oh vibrantes días de adolescencia en los que todo parecía más brillante y revelador!, mi interés fue inmediato.  El apartado se refería a todo aquello que es recomendable olvidar cuando se trata de “parecer inteligente” dentro de los círculos intelectuales, por lo que, no era sólo acerca de no dejar pasar cierto tipo de información indeseada, sino también, acerca de aprender a fingir que dicha información no está a nuestro nivel y por tanto no la dejamos pasar –aún cuando si lo hagamos-. Por supuesto, el autor lo decía todo en tono irónico, siempre consciente de la atroz paradoja de la que somos víctimas y creadores.
En fin, lo que allí se indicaba, es bastante parecido a lo que ahora diremos. Más bien, era de la misma naturaleza. Nos referimos a: televisión, reality shows, farándula, series, películas taquilleras, vidas de famosos, videos de moda en youtube, lectura ligera (novelas románticas, sagas para adolescentes, libros para mujeres del tipo “Por qué los hombres aman a las cabronas”, entre otros), la canción de moda, la estrella pop del momento... la lista podría seguir. 
Pero ¿por qué no queremos saber aquellas cosas?, o más bien, ¿por qué es preferible fingir o parecer que no las sabemos?. Una respuesta posible es que, lo que sabemos puede ser tremendamente revelador -y estamos conscientes de ello, por eso tanto cuidado-. Porque el uso y la costumbre dice que lo que sabemos es síntoma de lo que nos interesa, y es reflejo de la forma en la que usamos el tiempo. ¿Significa eso que si sé a qué hora dan los programas juveniles en la TV nacional y, peor aún, si sé sus nombres, soy estúpido? Ssno!...
El punto es que nos damos cuenta que no importa mucho lo que realmente significa, sino la manera en que es traducido por los otros. Así, el saber tararear bad romance de Lady Gaga, puede ser revelador de un gusto musical despreciable y de un intelecto poco desarrollado en un círculo específico. De la misma manera, no saber si Lady Gaga es un comestible, un satélite o una película, puede ser indicio de antipatía, ñoñería o estupidez en otro círculo. También debemos mencionar un tercer caso posible -de muchos otros-, y ese es cuando sabes bien quién es Lady Gaga y hasta conoces su canciones más populares, pero ¡oh no!, no es que te guste Lady Gaga per se, ¡para nada!, lo que sucede, es que la conoces para efectos académicos, es una manera de...examinar antropológicamente la sociedad y cultura posmoderna, por decirlo así. 
Por lo que, de acuerdo a lo señalado, todo se reduce, por lo menos en lo social, a tus expectativas. ¿A quien quieres agradar?, ¿de qué deseas ser parte?...
Independiente de la elección que hayas hecho, lo importante es que todo este embrollo es sintomático: Tenemos miedo a parecer poco inteligentes -por hacer uso coloquial del concepto- pero ¿tenemos miedo a ser poco inteligentes?. No os preocupeís viajeros, por el miedo se parte...
Carla.
 

Preguntas eternas de un año normal.


Comenzamos el 2012 y toda una vida nueva se esconde entre el término y el comienzo de cada mes.
Resulta que tengo una mente bastante extraña (y a estas alturas ya ni me pregunto porque es así) que tiene la manía de borrar toda memoria de un año a otro.
Me explico; si alguien me dice, Shio ¿Te acuerdas del viaje que hicimos en septiembre a lugar X? Mi respuesta usual seria algo así como: No…..¿yo estaba con ustedes?......................
Y este vacío de mente es bastante cómodo, prácticamente no tengo remordimientos.
Como es obvio que tengo un problema de lagunas mentales bastante grave, simplemente lo único que pasa por mi cerebelo todo el tiempo son preguntas entupidas como; ¿Por qué esa persona cree que nadie la esta mirando? ¿Por qué suenan los huesos de las manos? ¿Para qué mierda crearon los cuchillos plásticos si no cortan NUNCA nada? (omitan el detalle del no, nunca y nada puestos en una misma oración y contradiciéndose, estamos en CHILE!)
¡Ah! Y también preguntas mas personales y profundas, esas que pasan de un año a otro prácticamente sin respuesta y dando vueltas sobre si misma como si fueran un mundo totalmente aparte a nosotros, esas preguntas existencialistas, deplorables, que nos llenan de complejos y nos equiparan a filósofos traumatizados. (Porque seamos honestos, todos los filósofos y luego sus primos cercanos, los científicos,  terminan con problemas psiquiátricos).
Y entenderán que como comenzamos el año y prácticamente no tengo recuerdos que analizar, no tenia nada mas que rumiar aparte de estas cuestiones.

Bueno y todo esto nos lleva irremediablemente al ………..SEXO!!!!

OK, ¿Cómo es que llegamos a este tema? Se preguntaran ustedes.
¿Y por qué no? Es mi parte del blog, no tengo que tener una línea de pensamiento solamente.
El problema es que hablando de preguntas complejas y absurdas, hay al menos un  60% de ellas que tiene relación con la pareja, el amor verdadero, el entendimiento entre individuos (Oh ¿Alguien mas pensara lo que yo?), nuestro dramas con nuestro particular físico (¿Porque yo no tengo…? blah blah blah), el miedo a mostrarnos como somos por no tener aceptación o el miedo a quedarnos solos para siempre para siempreeeeeeeeeeee.!!!
A pesar de que toco este tema con bastante burla, es serio señores.
Es natural del humano hacerse estas preguntas al menos más de 100 veces en la vida, ya sea en nuestro día depresivo o cuando comenzamos a conocer a una persona que nos agrada como pareja….y vaya que es un tema grande.
El otro día estaba hablando con unas amigas y entre papafrita y terremoto salio este particular tema (que de particular no tiene nada): ¿Diferencia entre el sexo y hacer el amor?....y al mas puro sex&thecity comenzamos a verter nuestras opiniones…no nos golpeen o clasifiquen por hablar de esto, éramos 6 mujeres enfurecidas en un pub, celebrando el cumpleaños de una de nosotras, y con alcohol en el cuerpo.
Además, si no hablamos de esto con nuestros amigos… ¿con quien mas? (yo se que entre los hombres también lo hablan, tengo espías!!!!)
Después de gritos y más terremotos llegamos a la siguiente conclusión:
Sexo: Seria el acto sexual en su mas puro punto hormonal. No importa mucho con quien es, sino que importa la necesidad, eres desinhibido y te importa un rábano la satisfacción del otro, sino que velas por la propia….y esta bien, es natural, todos tenemos hormonas y a veces estas nos manejan. Es el coito y el acto de procreación animal regular.
Hacer el amor: Y aquí vino la discusión de verdad…esta cosa realmente no existe, es un estado psicológico creado por el humano. Hacer el amor, es sexo pero con alguien que te inspira un sentimiento. Generalmente te importa demasiado la opinión del otro y te sientes inseguro hasta de tu sombra. Lo gracioso es que te sientes inseguro antes de hacerlo la primera vez, porque luego es una entrega total, supuestamente.

No se si estas ideas son reales o son solo eso, ideas. Pero estas preguntas son cotidianas y  como tienen que ver con la psique no tiene respuesta objetiva…solo hay tres seguridades para todos nosotros:
Todos nos enamoramos alguna vez y a todos nos gusta el sexo...…
……Y las preguntas filosóficas jamás dejaran de quemarnos el alma….

Rocio.